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A los 80 años, murió Louise Glück, Premio Nobel de Literatura 2020

Este viernes, a los ochenta años, en su casa de Cambridge, en Massachusetts, murió la escritora estadounidense Louise Glück, ...

Este viernes, a los ochenta años, en su casa de Cambridge, en Massachusetts, murió la escritora estadounidense Louise Glück, Premio Nobel de Literatura 2020 “por su inconfundible voz poética que con una belleza austera hace universal la existencia individual” (ese mismo año obtuvo el Premio Tranströmer). Tenía cáncer. El editor estadounidense de la autora de El iris salvaje, Jonathan Galassi, de Farrar, Straus & Giroux, confirmó la muerte de la escritora a la agencia Associated Press. Había nacido el 22 de abril de 1943, en Nueva York, en el seno de una familia judía, y creció en Long Island.

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“En el tipo de arte que me atrajo, la voz o el juicio de la comunidad es peligroso. La precariedad del habla íntima se suma a su poder y al poder del lector, a través de cuya agencia se alienta la voz en su súplica o confianza urgente”, se lee en su discurso de recepción del Nobel, donde reveló su admiración por Emily Dickinson, William Blake y T. S. Eliot (con los que su poesía establece correspondencias).

Antes de publicar su primer libro, Primogénita, en 1968, poemas suyos aparecieron en revistas como The New Yorker, The Nation y The Atlantic Monthly. Por motivos de salud (tuvo anorexia nerviosa) no se graduó en la Universidad de Columbia, aunque asistió a cursos de poesía con los escritores Léonie Adams y Stanley Kunitz. Después de The House on Marshland y Figura descendente, en 1985 publicó El triunfo de Aquiles, con el que obtuvo un reconocimiento unánime.

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Escribió esa obra luego del incendio de su casa en Vermont. El cariz traumático o doloroso de las vivencias familiares y personales, abordado con una tonalidad casi impersonal, es uno de los motivos de la poesía de Glück. Otro es el carácter sagrado que le asigna a la naturaleza. Se divorció dos veces y tuvo un hijo.

Tras la muerte de su padre, dio a conocer otras de sus obras clave, Ararat, “el libro de poesía estadounidense más brutal y lleno de dolor publicado en los últimos veinticinco años”, según la crítica de The New York Times. Con El iris salvaje ganó el Premio Pulitzer en 1993. Siguieron Praderas, Vita Nova y Las siete edades. Su obra en español, que antes difundía Pre-Textos, pasó luego del Nobel a la editorial Visor. “Glück escribe para lectores a los que no les gusta que le griten”, escribió Pablo Gianera en LA NACION.

Murió Louise Gluck. La leí después de que le dieron el Nobel. Durante el último año de mi vida, que ha sido puro dolor, sus poemas fueron un lugar seguro para mí. Un lugar al que siempre regreso. pic.twitter.com/pcDZrI1xIP

— Andrés Felipe Vargas (@PipoVargas13) October 13, 2023

“Lo que trato de hacer en los poemas es sorprenderme a mí misma y, espero, al lector -dijo tras ganar el Nobel-. Si el lector siente que está a punto de acercarse a un final que puede imaginar, que parece coherente con el comienzo de la oración, hago que el poema dé otro giro, quiero que el lector esté un poco inquieto, que se sorprenda y que el final sea más interesante, más vivo. Escribo para mantener el asombro”. Aconsejaba detectar “las partes muertas”, predecibles, de los poemas. Sus ensayos fueron reunidos en dos libros; en español, en el volumen Ensayos completos.

Averno, de 2006, reconoce la herencia de Blake, en especial de Canciones de inocencia y de experiencia. En 2015 el presidente Barack Obama la condecoró con la Medalla Nacional de Humanidades. Noche fiel y virtuosa es su último libro publicado antes del Nobel. Recetas invernales de la comunicad, se publicó en octubre de 2021, y representa, ahora, una despedida en tono elegíaco de Glück.

Un poema de Louise Glück

Un recuerdo

Se apoderó de mí una enfermedad

cuya causa nunca llegó a determinarse,

aunque se fue haciendo más y más difícil

mantener una apariencia de normalidad,

de buena salud o de alegría existencial…

Poco a poco me fue apeteciendo estar solamente

con los que se me parecían; los busqué como pude,

algo que no era precisamente un asunto sencillo

puesto que estaban todos disfrazados o escondidos.

Pero al final encontré algunos compañeros

y en aquella época a veces salía a caminar

con uno u otro por el margen del río,

hablando otra vez con una franqueza que casi había

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olvidado…

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Y sin embargo, casi siempre guardábamos silencio.

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Preferíamos

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el río antes que cualquier cosa que pudiéramos decir…

En ambas orillas la alta maleza ondeaba

en calma, sin cesar, bajo el viento del otoño.

Y me pareció recordar este lugar

de mi infancia, aunque

en mi infancia no hubiera ningún río,

solo casas y jardines. Así que tal vez

estuviera regresando a aquel tiempo

anterior a mi infancia, al olvido, quizás

fuera ese río el que recordaba.

De Recetas invernales de la comunidad (traducción de Andrés Catalán)

Fuente: https://www.lanacion.com.ar/cultura/a-los-80-anos-murio-louise-gluck-premio-nobel-de-literatura-2020-nid13102023/

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