Temprano en la mañana, llegaron hoy al barrio Emerenciano Sena varios móviles de la Policía con una orden de allanamiento. Revisaron la casa de unos colaboradores de la familia del líder piquetero y se llevaron “elementos de interés” para la causa que habían sido trasladados allí desde lo de los Sena, en la calle Santa María de Oro 1460, donde los investigadores sospechan que Cecilia Strzyzowski fue asesinada.

El resultado de este operativo fue dado a conocer por el fiscal Jorge Cáceres Oliver este mediodía.

Además, la fiscalía investiga una extraña pavimentación en la misma zona. Un testigo reservado habría indicado que en los días posteriores a la desaparición de Cecilia, en el barrio controlado por los Sena se asfaltó una calle en un horario fuera de lo común -al parecer, de madrugada-, según pudo saber LA NACION de fuentes con acceso a la causa.

Los investigadores quieren saber si debajo del nuevo pavimento hay restos óseos, relató una fuente del caso. Para eso, se le encomendó a Gendarmería que levante el asfalto.

En total, fueron enviados unos 200 efectivos al barrio Emerenciano para todo el operativo de hoy.

Además, minutos antes del mediodía dejó hoy la fiscalía Gustavo Obregón, una pieza clave en la causa. Estuvo más de una hora, pero según fuentes del caso, esta vez no declaró. Obregón, que está imputado como “partícipe secundario” del presunto “homicidio agravado” de Cecilia, era un hombre muy cercano a los Sena y fue quien indicó un lugar en el río en el que se habría tirado el cuerpo de la joven, según su versión.

Mientras tanto, la fiscalía espera el resultado del peritaje sobre las comunicaciones telefónicas de los Sena. El clan destruyó todos sus teléfonos, pero la división Cibercrimen de la Policía del Chaco está investigando sus llamadas y mensajes. El informe de estas comunicaciones, previsto originalmente para ayer, debería estar presentado en los próximos días.

También la madre de Cecilia, Gloria Romero, visitó hoy la fiscalía acompañada por su abogado, Fernando Burlando. Ella y la tía abuela de Cecilia -con quien la joven vivía- tienen pendiente hacer un reconocimiento del dije y otras presuntas pertenencias de Cecilia encontradas por los investigadores. En principio, eso se haría mañana.

En el barrio Emerenciano todo lleva el sello de los Sena. La avenida San Martín divide los barrios dentro de lo que era el predio de tiro del Ejército. En el bulevar la escultura de un puño cerrado, color rojo, separa las aguas. Hacia la izquierda comienza el barrio Emenerciano, un lugar donde el nombre aparece en cada lugar estratégico, como la escuela, el centro de salud, el jardín maternal y los puntos de capacitación en oficios, como así también la biblioteca popular. El color rojo y el nombre de Emenerciano sobresalen a cada paso. La calle que corta San Martín y es la principal del barrio lleva el nombre de Milagro Sala.