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Cartas de lectores: Sinceridad y realismo, China en Tierra del Fuego, sin pan y sin trabajo

Carta e la semanaSinceridad y realismoLeo y escucho continuamente que los políticos deben dejar de lado su ego y cumplir con su vocación de servicio, si la tienen. Me pregunto: ¿cómo hacen para...

Carta e la semanaSinceridad y realismo

Leo y escucho continuamente que los políticos deben dejar de lado su ego y cumplir con su vocación de servicio, si la tienen. Me pregunto: ¿cómo hacen para llegar al poder si no pelean por él? Vivimos en una época con exceso de información. Todo lo que ocurre lo sabemos casi al instante. No dudo de que siempre hubo tensiones y discusiones en los partidos políticos. Solo las conocían unos pocos. Nos toca votar pronto. Muchos dicen que van a votar en blanco porque están hartos de votar siempre al menos malo. Yo quiero dar vuelta este concepto. Quiero votar por el mejor de todos. Por quien me muestre cómo va a ejecutar sus propuestas y quien más cerca esté de mis valores. ¿Quién no nos propone un país con mejor educación, salud, etc., etc.? En el cómo está la gran pregunta.

Pido a todos los candidatos que no solo comuniquen sus propuestas. Que cuenten también cómo las concretarán y los tiempos en que será posible ejecutarlas. Por favor, sean sinceros y realistas. La política es el arte de lo posible.

Angélica Pasman

angelicapasman@gmail.com

China en Tierra del Fuego

Mientras estamos entretenidos por trifulcas políticas, un gobernador, Melella, nada menos que de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, firmó un memorándum de entendimiento con una empresa china por el cual autoriza la construcción de un puerto multipropósito. Creo interpretar que actúa como si fuera su casa, salvo que no se dé cuenta de que con esa concesión está entregando soberanía.

¿Para esto San Martín entregó su vida?

Mónica Brindisi

DNI 5.198.492

Sin pan y sin trabajo

Sin duda la pintura de Ernesto de la Cárcova Sin pan y sin trabajo, en toda su expresión, nos acerca a la realidad actual de nuestro país y su mercado laboral. En la obra, la figura de la familia permite observar la dimensión esencial del sufrimiento de la persona que ha perdido el trabajo, por cuanto el trabajo participa de su dignidad. En lo personal, con todo lo que ella es y con todo lo que ella tiene. En lo social, porque es un instrumento para construir la sociedad terrena, comprometiendo su configuración humana, mediante expresiones físicas e intelectuales. En las condiciones actuales del país se ven situaciones que son algo más que la necesidad de trabajo de unos pocos. Se trata de una demanda social, más amplia. En ese peregrinar de búsqueda están nuestros hijos, jóvenes profesionales que se alejan y eligen el mundo como refugio de su vocación.

A la distancia, sostienen la posibilidad de que las herramientas obtenidas en la universidad, como refleja la obra de De la Cárcova, no se conviertan en “ociosas”.

María Inés del Castillo

delcastilloines@yahoo.com.ar

Médicos

La pandemia mostró de manera amplificada la situación que padecen los médicos en la Argentina, que para trabajar necesitan hacer una carrera que dura ¡once años!: CBC, siete básicos con el rotativo, más tres o cuatro de residencia o concurrencia gratis, con un horario extenso y guardias. Acceder a esas dos últimas categorías no es fácil, y el que no entra queda en la banquina. Después de toda esa intensiva preparación, con el flamante título y certificados bajo el brazo… está en la calle. Con suerte podrá trabajar para alguna empresa que le pagará muy poquito y no en relación de dependencia, o conseguirá alguna cosa “menos peor”. Ejercer de manera independiente, de todo punto imposible, tendrá, todos tendrán, que vérselas con una competencia que no tienen las demás profesiones u oficios: obras sociales, prepagas y muchos hospitales, que atienden sin cobrar; quizá consigan un puesto en alguno de estos últimos. Ahí seguirán aprendiendo, ganando poco. En algunos, sobre todo de la provincia, el problema no será que no les paguen, sino que no les peguen; con la peste, sé de varios casos.

Durante la pandemia, a la noche, a los médicos los aplaudían, sí… como a los gladiadores. Ahora, ni eso, han caído en el olvido, solo se acuerdan de ellos… los enfermos.

Alejandro Sicardi

sicardi@sicardialejandro.com

Amenaza

Para quienes tenemos la esperanza de que las próximas elecciones resulten en un gobierno que nos saque de la postración en la que está nuestro país, las divisiones en el único partido con posibilidades de ganarles a los responsables de esta decadencia aparecen como una amenaza de arrancar una derrota de las fauces de la victoria.

Juan Ángel Peña

penapirovano5@gmail.com

Designaciones judiciales

El editorial del 3 de junio titulado “Turbias designaciones judiciales” mostró las andanzas de la jueza de la Cámara Federal de Casación Penal, doctora Ana María Figueroa, al demorar indebidamente causas seguidas contra la actual vicepresidenta de la Nación. Agregaré otra. La magistrada fue designada por el anterior gobierno kirchnerista para integrar la Sala 2ª de ese tribunal pese a que se había desempeñado con anterioridad por la Secretaría de Derechos Humanos que representó como querellante en causas de “lesa humanidad”, lo cual el artículo 55 inc. 1° del Código Procesal Penal de la Nación prohíbe en pos de la imparcialidad de los jueces. Al ser recusada por ese motivo por las defensas, sus colegas de sala, doctores Slokar, Ledesma y Gemignani, la apartaron de las causas de lesa humanidad, por haber tenido ese desempeño anterior como querellante, y de aquellas en las que en adelante pudiera corresponderle intervenir. Pero poco después, por decreto 143/2013 de la entonces presidenta Cristina E. Fernández de Kirchner, se dispuso mudar a la doctora Figueroa a la Sala 1ª de la Casación, donde con todo desparpajo volvió a juzgar los casos de lesa humanidad hasta hoy. Además, esta sala interviene en causas criminales de interés de la actual vicepresidenta de la Nación.

Cosas veredes, Sancho, que non crederes.

Enrique Munilla

DNI 4.433.538

Drones

La autoridad de aviación civil argentina exige una cantidad enorme de requisitos para volar un dron (VANT- vehículo aéreo no tripulado), incluso de los más pequeños, o vuelve irrelevantes las capacidades de estos, con limitaciones ridículas (no volar a más de 10 metros de altura o a más de 200 metros del controlador) hasta para quienes tienen uno con fines recreativos. En teoría, está prohibido volarlos en casi todos lados salvo que esta institución otorgue una dispensa específica. Obviamente, ante semejante cantidad de restricciones, la realidad destroza la rigurosa reglamentación. Quienes tienen un dron no lo registran, no cumplen con la norma, y lo vuelan alegremente y de acuerdo con la capacidad que tienen. Este conjunto de reglas, basadas en el potencial peligro para la navegación aérea, no solo no pueden seguir la velocidad de avance de la tecnología, sino que tampoco pueden ser acompañadas del poder de policía, ya que el espacio aéreo es enorme. Las reglamentaciones rigurosas, e ilógicas, tienden a no cumplirse, y en nuestro país sobran ejemplos. El chaleco flúo y el casco con el número de chapa patente en las motos es uno los últimos espasmos regulatorios que no se cumplen. Se requieren muchos menos requisitos para conducir un automotor, incluso de gran porte, o para ser dueño de un arma de fuego. Para volar un pequeño dron se necesitan: 1) Certificado de competencia de piloto, estudios psicofísicos, análisis de sangre y orina cada 3 años y un examen rigurosísimo. 2) Registrar el dron en la ANAC (factura de compra, boleto de compraventa, etc.). Casi nadie los registra. 3) Seguro de responsabilidad civil. Todo ciudadano es responsable por el daño que ocasionen el mismo o sus cosas, pero sin embargo solo se aseguran algunas. El barrilete, aparentemente, y por ahora, está exento de seguro. 4) Certificado de explotador de VANT y manual de operaciones (a escribir por el piloto). 5) Autorizaciones o dispensas para volar por encima de la altura permitida (120 metros en la mayoría de los casos) o en espacio aéreo controlado. El 99% del país no es espacio aéreo controlado.

¡Se requieren menos requisitos para ser presidente de la Nación! Se prohíbe y restringe de manera irracional, en la gran mayoría de los casos, volar un aparato a control remoto que pesa alrededor de 500 gramos. Por otro lado, volar el avión presidencial a ras del suelo, sin autorización, sobre uno de los principales aeropuertos del país no tiene consecuencia alguna.

Bernardo Shaw de Estrada

bshawde@gmail.com

Colectora a Tigre

La Colectora Este del Acceso a Tigre entre las calles José Ingenieros y Uruguay constituye uno de los dos únicos sectores de colectora no pavimentados. Esto, pese a que los vecinos frentistas reclamamos por ese pavimento desde hace 38 años. Con las últimas lluvias, la calle está totalmente poceada y con serruchos dignos del peor camino del país más subdesarrollado del planeta. Eso sí, la tasa de alumbrado, barrido, limpieza y conservación de vía publica (¿?) llega puntualmente y con aumentos todos los meses.

Guillermo Manzato

DNI 8.245.679

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Fuente: https://www.lanacion.com.ar/opinion/carta-de-lectores/cartas-de-lectores-sinceridad-y-realismo-china-en-tierra-del-fuego-sin-pan-y-sin-trabajo-nid11062023/

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