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Construyó una casa de verano en Moquehue, pero su vecino la usurpó y ahora la explota para el turismo.

El propietario aseguró que no tiene respuestas de la Dirección de Tierras por las mejoras que adquirió hace 20 años en Moquehue.

Lo que había comenzado como el sueño de una casa de verano cerca de un lago cordillerano se convirtió en una pesadilla para un vecino de Cipolletti que en 2004 compró las mejoras de un predio de 7.000 metros cuadrados en Moquehue y hoy quedó expulsado de su propia vivienda por los vecinos de al lado. Aunque hizo denuncias y presentaciones formales a la Dirección de Tierras, aseguró que ningún organismo le da una solución.

"Esto empezó en 2004, cuando compré las mejoras a Juan José Avellaneda, que estaba registrado en Tierras como ocupante o tenedor, con todos los reconocimientos", dijo el perjudicado sobre el predio de 7 mil metros cuadrados ubicado en Moquehue, que depende de la Municipalidad de Villa Pehuenia. Como la casa estaba a medio construir, invirtió dinero en la finalización del inmueble, con la intención de tener una casa de vacaciones.

"La terminé de construir y ese año, en 2005, el vecino de al lado, que no estaba reconocido en Tierras, empezó a ocupar una porción. Al principio era sólo el 10% del terreno y hasta esquivaba un galpón que era parte de la propiedad", afirmó.

Los años pasaron y el vecino de al lado avanzó con la usurpación. "Al principio pudimos hablar pero después se hizo imposible. Yo le decía que no correspondía que avance sobre el terreno porque tenía los planos presentados en la Dirección de Tierras", aseguró.

"En 2013, después de esas discusiones, empezó a hacerme la vida imposible", se lamentó. Como la propiedad tomaba agua directamente del lago a través de una bomba, el acusado rompía las conexiones para dejarle su casa de verano sin agua. Así, César tenía que regresar a Neuquén cada vez que iba de vacaciones, porque no contaba con los servicios básicos para quedarse.

"No podíamos sostener el diálogo, me decía 'te vas a quedar sin nada' y además de avanzar con la usurpación, me robó la chimenea de una estufa que tenía en la casa", afirmó.

La ocupación total de la casa

El damnificado tenía cada vez más dificultades para quedarse en su casa de verano. En 2013 tuvo una problema de salud y los médicos le recomendaron no insistir con un viaje a Moquehue para evitar una situación de estrés que tuviera consecuencias cardíacas. Así, dejó pasar el tiempo sin reclamar por la propiedad.

"El tipo siguió avanzando, ahora ya no sólo tiene un terrenito, tomó todo el terreno 7 mil metros, la casa incluida. No podía entrar a la casa porque estaba ocupada por él, hice la denuncia a la Policía y los organismos hicieron muy poco", se quejó y agregó: "Este señor no sólo me usurpó a mí sino también parte de una calle pública. La Municipalidad lo supo y no hizo nada, y también usurpó a un terreno vecino, del otro lado, que es una iglesia".

Aunque no cuenta con un título registrado por su terreno porque compró las mejoras de un predio cedido por la Corporación Pulmarí por 99 años, afirmó que, tras tener su boleta de compraventa, realizó los trámites correspondientes ante la Dirección de Rentas. Además, pagó el certificado final por la construcción de su vivienda a la Municipalidad de Villa Pehuenia. "Me ofrecí a pagar los impuestos pero no se puede hacer porque hay registro de esa propiedad", detalló.

Por otro lado, su vecino, que es oriundo de Zapala, adujo que el terreno lindante pertenecía a su abuelo y que luego él se lo transfirió a su cuñada.

Sigue sin respuestas

Aunque tocó puertas en todos los organismos públicos, hasta Gendarmería, Pulmarí y la Justicia de Zapala, todavía no hay respuestas para su solicitud. Él había adquirido las mejoras con el compromiso de construir una hostería para promover el turismo de Moquehue. "Presenté los planos pero no pude avanzar porque no tenía ninguna garantía de seguridad con el vecino", detalló.

Por su parte, el usurpador avanzó en la explotación turística de la zona, que tiene bajada al Lago Aluminé. Según detalló el perjudicado, hoy ofrece las viviendas en alquiler con el nombre de Cabañas Aymará, aunque consideró que no deben estar habilitadas porque no hay títulos concretos que acrediten su propiedad.

"Me dicen que la solución la tiene que dar la Dirección de Tierras, pero no he tenido respuestas pese a todas las denuncias", dijo el vecino cipoleño, que presentó una serie de denuncias e intercambió cartas documento con los usurpadores. "Ahí rechazan todo pero con formalidades de las cartas documento, no presentan nada que acredite que tienen derecho sobre el lugar", afirmó.

Más allá del dinero que invirtió en la compra de las mejoras y la construcción de la casa de verano, el hombre busca que se resuelva su reclamo para sentar un precedente sobre potenciales usurpaciones que se puedan dar en ese sector.

Fuente: Lm Nqn

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