Este mediodía, el precandidato a presidente de Pro para las elecciones 2023, Horacio Rodríguez Larreta, llegará acompañado junto a su compañero para vice, Gerardo Morales, a General Rodríguez, provincia de Buenos Aires. Ambos se mostrarán un lugar que fue ícono de las causas de corrupción del kirchnerismo: el convento donde el exsecretario de Obras Públicas José López arrojó bolsos con dinero que no podía justificar.

En busca de endurecer su línea contra la terminal K del Gobierno, la dupla de Juntos por el Cambio hará un anuncio desde el monasterio Nuestra Señora del Rosario de Fátima que estará vinculado a las acciones de transparencia pública que piensan impulsar si acceden a la Casa Rosada, según pudo confirmar LA NACION de fuentes allegadas a ambos dirigentes.

Con el objetivo de develar sus propuestas día a día a medida que avanza la carrera hasta las PASO del 13 de agosto, donde deberá enfrentarse a Patricia Bullrich y Luis Petri, del ala más vehemente de la coalición, Rodríguez Larreta alterna una idea de construir una “nueva mayoría” con la suma de otras fuerzas y un discurso moderado, pero también intenta ahora guiños hacia los propios, el núcleo más antikirchnerista de Pro.

“El fin de los privilegios” es el nombre del nuevo paquete de propuestas que se darán a conocer hoy desde las 12.15 en el convento. Ahí también van a estar el precandidato a gobernador bonaerense Diego Santilli -que se medirá en la interna con el intendente de Lanús, Néstor Grindetti- y Silvia Lospennato, segunda en la lista a la Cámara de Diputados en la provincia de Buenos Aires.

En la madrugada del 14 de junio de 2016, en pleno gobierno de Mauricio Macri, López, que ya no era más secretario sino diputado del Parlasur, saltó el portón del convento para esconder allí 8.982.000 dólares, armado con una carabina semiautomática. Ese día fue detenido por la Policía. Después se filtró el video de la cámara de seguridad del monasterio, en el que quedó plasmado todo el accionar del exfuncionario que era la mano derecha de quien fue ministro de Obras Públicas Julio de Vido.

Convertido en un símbolo de la corrupción, López recibió a principios del mes pasado la noticia de que la Corte Suprema de Justicia había dejado firme la condena a siete años y medio de cárcel contra él por enriquecimiento ilícito y portación ilegal de un arma.