Desde que explotó el escándalo del “yategate”, por las lujosas vacaciones de Martín Insaurralde con la modelo Sofía Clerici en Marbella, la palabra de Jesica Cirio era una de las más buscadas. Primero, la modelo y bailarina rompió el silencio en el noticiero de Telefe, donde se defendió públicamente ante la imputación por presunto enriquecimiento ilícito y lavado de dinero. En el día de ayer, volvió a hablar del tema en La peña de morfi, en un íntimo mano a mano con Georgina Barbarossa. Al finalizar el programa, la conductora -que volvió este domingo para despedirse definitivamente del programa- opinó al respecto y contó cómo la vio a Cirio durante la charla.

“Fue un programa muy especial, ¿cómo la notaste a ella?”, le preguntó Alejandro Guatti, el notero de Intrusos, a la salida del estudio, en Martínez. “Incómoda, ¿cómo va a estar?”, lanzó Georgina desde su auto y con un gesto serio muy distinto al que nos tiene acostumbrados. “Le pregunté todo lo que todos tenemos ganas de saber y preguntarle: ¿cómo no se ha dado cuenta antes?”, lanzó la actriz.

“Insististe mucho con esa pregunta, ¿sentiste que ella se molesto?”, indagó el movilero. “No, no, no; no se molestó. Lo que pasa es que me llama la atención que vivas diez años con una persona y no te des cuenta de la cantidad de gastos siendo un empleado público, donde está gastando la plata de todos los argentinos”, expresó la conductora dando cuenta de su postura frente a la situación.

“¿Le creíste?”, preguntó el movilero, ante lo cual Barbarossa se mostró dubitativa. “Qué se yo... no sé. La verdad que no sé eso. Supongo que no es fácil para ella y bueno, se tiene que expedir la Justicia. Creo que realmente es un momento muy perjudicial para ella”, indicó con tono serio. E inmediatamente volvió a hacer hincapié en cómo a lo largo de los años que estuvo en pareja con Martín Insaurralde no se dio cuenta “de nada”. “Me parece raro que no te des cuenta. Viene Vasco y me dice: ‘negra, vamos a dar una vuelta al mundo’ y me lleva en primera clase y yo le digo: ‘¿Vasco, de donde sacaste la guita…?’”, reflexionó la actriz.

Tras aclarar que luego de la entrevista no hubo ningún tipo de reproche por sus preguntas o comentarios punzantes, Georgina contó qué fue lo que hablaron detrás de cámara. “Le pregunté si estaba bien, si se sentía bien, pero no hubo ningún tipo de problema. Ella no está bien, ahora está metida en un despelote muy grande y tiene que expedirse la Justicia”, remató Barbarossa.

Luego de hablar el viernes en el noticiero del mediodía de Telefe, Jesica Cirio se sometió a un mano a mano con Georgina Barbarossa en La Peña de Morfi. A lo largo de la charla, la co conductora profundizó sobre su imputación, desmintió el acuerdo de divorcio por 20 millones de dólares y dio a entender que la ruptura se dio por supuestas infidelidades del exjefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires. Al mismo tiempo, manifestó que está a disposición de la Justicia en caso de que se lleve adelante una investigación por enriquecimiento ilícito.

Sin embargo, algunas preguntas de su compañera incomodaron a la bailarina en varios momentos. Uno de ellos fue cuando Barbarossa le preguntó si no le llamaba la atención el nivel de vida que su exmarido llevaba en relación a su sueldo y le pidió detalle de sus gastos. “No soy investigadora. No estaba atrás de sus gastos ni de su economía”, lanzó tajante Cirio mientras advertía que su vida no cambio en nada desde que se casó con el político. “Para el nivel de vida que yo siempre llevé, los viajes que hacíamos eran algo dentro de mi normalidad. Yo siempre me bancaba mis cosas, mis gastos y mis viajes. Aunque también había gastos en común. Quiero que quede claro que mi vida no cambió en absolutamente nada después de casarme con él. Lo que se vio en los videos no era la vida que llevaba conmigo. Nunca vi una ilegalidad en nada de lo que estaba haciendo. Yo me compraba mis cosas, me daba mis gustos y viajaba como lo hice siempre”, explicó.

Otro de los momentos más punzantes fue cuando Barbarossa le preguntó por los motivos de su separación, que se produjo en noviembre del año pasado. Entre lágrimas, la modelo reveló que al momento de separarse había tenido muchas sospechas de infidelidad. “Me contaban cosas y yo no lo podía ver. Me siento una tarada, en noviembre me decían cosas y yo pensaba: ‘no puede ser’. Cuando vi los videos me sentí traicionada, fue frustrante pensar que todo lo que vivimos antes fue mentira. Durante muchos años me hizo creer algo que no era así”, contó con la voz quebrada. “¿Te arrepentís de algo?”, quiso saber Barbarossa. “No, porque cuando lo conocí yo confié en él y en el amor”, confesó.