La rutina del lavado de ropa es una tarea que realizamos con total naturalidad sin detenernos a considerar su importancia. Pero lo que sucede es que en esta simple actividad se oculta un universo de cuidados que impacta directamente en el lavarropas.

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Para mantener la ropa limpia, sin manchas y libre de olores desagradables se deben considerar ciertos factores relacionados con la premisa de cuidar el preciado electrodoméstico y así proteger también la economía del hogar. Por eso, resulta de vital importancia prestar atención a la forma en que lavamos para extender la vida útil del lavarropas y para mantener la ropa como nueva.

De hecho, existen varias prendas que no son aptas para el lavarropas por lo que introducirlas allí puede tener consecuencias desastrosas tanto para la ropa como para el artefacto doméstico. En este sentido, se destacan las telas impermeables utilizadas en pilotos, camperas o pantalones que resultan un verdadero peligro debido a su capacidad de ser resistentes al agua.

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Es que durante el lavado estas prendas pueden absorber una gran cantidad de agua convirtiéndose en una especie de globo que puede estallar en la etapa del centrifugado, algo que terminaría destruyendo por completo el lavarropas.

De ahí que lo ideal para mantener limpia la ropa impermeable sea recurrir al lavado a mano o, en todo caso, llevarla a una tintorería especializada que se encargue de este tipo de tareas para evitar arruinar las prendas y, a la vez, no tener que enfrentar reparaciones costosas en casa.

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También hay algunos objetos que, olvidados en los bolsillos de la ropa, pueden provocar daños fatales en el aparato, como las monedas y las llaves. Las primeras son tan pequeñas que pueden colarse por el filtro del lavarropas o quedar atrapadas en el tubo de drenaje en el momento del lavado. Además, estas piezas de metal también son capaces de dañar el tambor o de romper el cristal, si es que se trata de una lavadora con tapa horizontal, al ser arrojadas con fuerza durante el centrifugado.

Lo mismo aplica para las llaves. Debido al material con el que están fabricadas, a su peso y a su forma, las llaves son una variable de riesgo tanto para las prendas que se pueden romper como para el interior del lavarropas. El consejo, entonces, es claro: hay que revisar con detenimiento los bolsillos para verificar que estén vacíos.

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Por último, los objetos de goma, como las alfombras de baño, tampoco se pueden meter a lavar en la máquina ya que pueden arruinarse y afectar también el funcionamiento del lavarropas. La mejor alternativa en estos casos es limpiar a mano.