Marcelo Longobardi consideró “benévolas” las formas de medir los ingresos de las personas “para colocar un poco más de gente en la cuasi extinguida clase media argentina” y criticó en duros términos al presidente Alberto Fernández y al ministro de Economía, Sergio Massa, por estar “dramáticamente” enfrentados en un contexto económico “recontra crítico” de alta inflación y escasez de reservas.

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Después de que se conocieran las cifras del Observatorio de la Deuda Social Argentina elaboradas por la Universidad Católica Argentina (UCA) sobre las personas de clase media que conforman el universo de los “nuevos pobres”, y tras la publicación de los datos de pobreza en la Ciudad de Buenos Aires, según los cuales una familia tipo necesitó en mayo más de $ 222.601 para no ser considerada pobre, esto sin contar el pago de un alquiler, el periodista afirmó que tanto el crecimiento de la pobreza, la alta inflación y la escasez de reservas como la pelea entre el primer mandatario y su ministro son una “escena muy anormal que hemos naturalizado”.

“Una familia tipo porteña en la ciudad de Buenos Aires, esto es un matrimonio con dos hijos, necesitó en el mes de mayo más de $ 222.601 para no ser considerada pobre. Obviamente que si alguien gana 5000 pesos más que esto es también, no pobre, repobre”, dijo el conductor de Radio Rivadavia. “Pero bueno, los parámetros con los cuales se mide la pobreza en la Argentina en general son bastante benévolos; para colocar un poco más de gente en la cuasi extinguida clase media argentina”, añadió.

“Y hacen falta 342.000 pesos para ser considerado de clase media, que es una clase que está estrujada en la Argentina y por supuesto en vías de extinción, directamente en vías de extinción. En ambos casos, sobre la Ciudad de Buenos Aires, estos datos excluyen el alquiler”, explicó el periodista.

“En la Argentina hay cada vez menos propietarios, y los alquileres están duplicando su valor en este mes de junio. Con estos datos, estos números son muy relativos, y por supuesto, dramáticamente benévolos, ¿eh? Para juzgar qué argentinos pertenecen a una clase muy, muy, muy empobrecida, a una ex clase media, o eventualmente, y con mucha suerte, a la clase media”, consideró Longobardi.

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En este sentido, apuntó directamente con Fernández y Massa: “El ministro de Economía está metido en la política; por lo tanto, hay acá una serie de cuestiones, de interrogantes adicionales, porque además de estar más involucrado en la política que en la economía, (Sergio Massa) está enfrentado con el Presidente”.

“Es una escena que nosotros hemos naturalizado, pero que es muy anormal, ¿no? O sea, la economía está en un estado recontra crítico, con la inflación del 150% para arriba, sin reservas, y con pronósticos adversos todos los días, el Presidente y su ministro de Economía están dramáticamente enfrentados”, criticó. Y cerró: “Como está también (enfrentado) con el ministro del Interior, (Wado De Pedro). Es una cosa que no se puede creer”.