El marcador central y capitán de Boca, Marcos Rojo, fue protagonista de la semifinal ante Palmeiras desde mucho antes de que comenzara el partido en San Pablo. En principio, porque Jorge Almirón esperó hasta último momento para incluirlo en la formación, debido a que Rojo arrastraba una sobrecarga muscular. Pero así y todo, su presencia era tan importante que jugó pese a no estar en plenitud. El desarrollo del partido, que terminó con Boca celebrando el pase a la final de la Libertadores, le dio protagonismo a Rojo, pero no el que hubiera deseado: se fue antes de la cancha de lo que le hubiera gustado...

Es que Rojo fue expulsado a los 20 minutos del segundo tiempo por una falta fuera del área a Kevin Macedo. El delantero de Palmeiras, que ingresó en el complemento y le cambió la cara al equipo paulista, buscó el desborde por la banda derecha ingresando en velocidad; Rojo le salió al cruce, pero llegó a destiempo y se encontró con el pie del contrario en una clara falta. El árbitro Andrés Matonte no dudó, le mostró la segunda amarilla y el capitán de Boca debió dejar el campo de juego. La expulsión de Rojo obligó a Jorge Almirón a un cambio para sostener la línea defensiva e ingresó Nicolás Valentini en lugar de Valentín Barco, que junto con Edinson Cavani eran los dos mejores jugadores de Boca.

Antes de la expulsión, Rojo -que jugó al límite durante todo el partido y arriesgó más de lo debido-, ya había merodeado la tarjeta roja. A los 5 minutos del segundo tiempo, el ex jugador de Manchester United, Sporting Lisboa y la selección argentina fue con la pierna levantada contra Rony, en una acción temeraria que estuvo a centímetros de impactar en la cara del rival. Esa circunstancia fue la que evitó que el defensor recibiera la roja directa y fue el elemento que tuvo en cuenta la revisión del VAR, que validó la primera decisión del juez del encuentro, de amonestar al jugador de Boca.

En el video y audios que la Conmebol publicó en redes sociales después del partido se observa que la falta es clara, pero en el análisis de la jugada también se puede determinar que por centímetros, y a pesar de que Rony se toma el rostro, no impactó en la cara del rival, lo que salvó a Rojo de ser expulsado en forma inmediata. Luego de chequear la jugada, los jueces del VAR se comunicaron con el árbitro de campo y validaron la decisión previa con una breve y rápida explicación: “Marcos Rojo juega la pelota y el contacto en la cara es mínimo, así que te confirmo la amarilla. No hay movimiento extra de Marcos Rojo para agredir y juega la pelota primero”. Los jugadores de Palmeiras habían rodeado al árbitro, exigiendo la expulsión de Rojo. El defensor le explicó con palabras y ademanes al árbitro lo que hizo en la jugada. Lo cierto es que la acción fue temeraria, sobre todo porque luego de la falta dejó su pierna estirada.

Una situación similar protagonizó el central de Boca en el encuentro por cuartos de Final frente a Racing de Avellaneda en la Bombonera a los 20 minutos del primer tiempo. Marcos Rojo fue a disputar un balón aéreo dividido con Maxi Romero pero estiró demasiado su brazo e impactó sobre el rostro del delantero de Racing. El árbitro brasileño Wilton Sampaio, que se encontraba muy cerca de la jugada, le sacó inmediatamente la tarjeta amarilla ante la airada protesta de los jugadores visitantes.