A un mes de finalizar su mandato al frente del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni confirmó que no continuará en ese cargo cuando el 10 de diciembre comience el segundo período de Axel Kicillof en el Ejecutivo bonaerense. Sin embargo, no se retirará de la función pública, sino que asumirá su banca en la Legislatura provincial.

“Voy a ser senador de la provincia de Buenos Aires. Voy a trabajar en darle las herramientas al Poder Judicial para que no pueda hacerse el distraído en esos grises que hay a la hora de interpretar las leyes”, sostuvo el funcionario en declaraciones a la señal televisiva A24.

Berni integra el gabinete de Kicillof desde 2019. Si bien durante su gestión atravesó diversos momentos de conflicto - tanto por la problemática de la inseguridad como por diferencias internas con el resto del oficialismo- y en más de una oportunidad quedó en duda su continuidad, siguió en el puesto y dejará la función que ejerce dentro de poco menos de un mes.

El ministro integra el grupo de dirigentes que el 19 de octubre consiguió ser electo para llevar adelante otro rol durante los próximos cuatro años. Según supo LA NACION, el gobernador dejó saber antes de las elecciones que el recambio sería profundo y que incluiría una renovación de los cuadros -incluso aquellas figuras consideradas “valiosas”- para dar aire a su gestión.

En los comicios generales, además de Berni -que obtuvo una banca como senador provincial-, el ministro de Trabajo, Walter Correa, logró un escaño como concejal en Moreno; el ministro de Infraestructura, Leonardo Nardini, fue electo intendente de Malvinas Argentinas; la presidenta del Instituto Cultural. En tanto, el hasta entonces titular del Ministerio de Justicia, Julio Alak, finalmente ganó la intendencia de La Plata.

En una entrevista que ofreció la semana pasada a TN, el responsable de Seguridad evaluó el escenario político rumbo al balotaje, remarcó que el candidato de Unión por la Patria (UP) “es una de las personas que entiende la política, que conoce el estado, que tiene la templanza para llevar adelante los destinos del país” y consideró que uno de los problemas que tuvo el peronismo “es que no tuvo la capacidad de generar nuevos liderazgos con la impronta que sí tiene Sergio Massa”.

Sin embargo, si bien reafirmó su acompañamiento a la postulación del ministró de Economía, afirmó que “los liderazgos no se reemplazan” y enfatizó en que su conductora política seguirá siendo la vicepresidenta Cristina Kirchner. “Sergio Massa sería el Presidente, mi líder sigue siendo Cristina. Massa va a ser el hombre al que vamos acompañar porque el conjunto decidió que sea el candidato que representa este gran frente”, dijo y señaló que hay “una expectativa depositada en él por sus atribuciones” y opinó que, en caso de que llegue a la presidencia, “va a consultar a quien tenga que consultar porque los intereses de la patria para Massa no tienen fronteras ideológicas”.