El campo de juego del estadio Monumental, de Lima, ya no era el escenario del partido de fútbol que, hasta hacía unos pocos minutos, habían disputado Universitario contra Gimnasia y Esgrima de La Plata por el grupo G de la Copa Sudamericana. Ahora, se trataba de un espectáculo deplorable donde jugadores de un lado y del otro se tomaban a golpes de puño y empujones. Tal fue la violencia, que uno de los arqueros del equipo local, José Carvallo, corrió unos metros y le asestó una brutal patada a la espalda del delantero argentino Agustín Ramírez.

Según se desprende de varias imágenes captadas por la transmisión oficial y testigos de los incidentes, el portero de Universitario se había involucrado bastante en la trifulca para intentar separar a los jugadores, pero en un momento salió desaforado hacia donde estaba Ramírez y lo pateó por la espalda.

Según informaron los medios peruanos, los jugadores de la U reaccionaron porque los del Lobo los habrían llamado “monos”.

Esa fue una de las tantas escenas de violencia que obligaron a que la policía peruana ingresara al campo de juego para separar a los manifestantes. Una vez que el encuentro estaba llegando a su final y Gimnasia de La Plata se despedía de la Sudamericana, se desató una pelea entre algunos jugadores visitantes con otros del conjunto local. Leonardo Morales, del “Lobo”, y Andy Polo, por el lado de los anfitriones, eran los más envalentonados.

¡BATALLA CAMPAL EN LIMA! Los jugadores de #Gimnasia y #Universitario se cruzaron luego del triunfo del equipo local.

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Así, el Grupo G se cerró con Goiás primero y clasificado a octavos de final con 12 puntos, seguido por Universitario con 10, mientras que Independiente Santa Fe concluyó con 7 y Gimnasia con 4. El equipo argentino se convirtió en el segundo club albiceleste, junto con Huracán, en quedar eliminado de esa copa.

En los primeros cinco minutos de partido, el conjunto platense señaló dos tantos anulados por el árbitro uruguayo Esteban Ostojich por posiciones adelantadas. Salvo esporádicos intentos de los locales, alentados por una multitud que colmó el estadio capitalino, Gimnasia evidenció ser el más animoso a la hora de buscar una victoria que se volvía indispensable, sobre todo porque además dependía de un triunfo del brasileño Goiás en su visita al colombiano Independiente Santa Fe.

Pero cuando estaba en su mejor momento en el primer tiempo, sobre los 40 minutos apareció Piero Quispe con un remate bajo contra el palo izquierdo del arco de Tomás Durso para otorgarle la ventaja a los dueños de casa.

A sabiendas de que con el triunfo tenían lugar en ese espacio que pretendía ocupar Gimnasia, los jugadores de Universitario ya no arriesgaron tanto, lo que hizo más difícil el trabajo del equipo argentino.