Para un joven de 26 años de Zapala, la tercera fue la vencida. Cansadas las autoridades de intentar de que entienda que debe permanecer en su casa por el riesgo de contagio del coronavirus y los decretos que establecen el aislamiento preventivo obligatorio, terminaron por formularle cargos y dictarle la prisión domiciliaria por los constantes incumplimientos.

El pedido fue realizado, pasado el mediodía del sábado, por la fiscal del caso Laura Pizzipaulo y la asistente letrada Margarita Ferreyra. De acuerdo lo que trascendió de la audiencia, el joven violó la cuarentena por primera vez el 22 de marzo cuando fue demorado en horas de la madrugada. La segunda detención se produjo el 27 de marzo en la noche y finalmente hoy en la mañana. En ninguna de las oportunidades pudo dar argumentos claros y como no está comprendido en el grupo de trabajadores exentos se terminó tomando la decisión de formularle cargos.

LMN supo que en al menos una oportunidad lo había detenido tomando cerveza en la plaza de Boca en Zapala.

Es es así que la fiscalía lo acusó por la violación de las medidas adoptadas por autoridad competente en concurso ideal con desobediencia a un funcionario público, en calidad de autor.

“Con dichas conductas reiteradas y manifiestamente desinteresadas, el imputado violó las medidas adoptadas para prevenir la propagación del Coronavirus COVID-19 tanto por el gobierno nacional como provincial", plantearon las representantes del Ministerio Público Fiscal.

A esto se agregó el pedido de la prisión domiciliaria hasta el 12 de abril, fecha que concluye el decreto nacional. La jueza de garantías que intervino en la audiencia avaló los cargos y también la domiciliaria.

Días atrás, también en Zapala, la fiscalía había formulado cargos a otro hombre que había incumplido en reiteradas oportunidades la prohibición de circular y el aislamiento obligatorio. Ese hombre también está en la actualidad cumpliendo con la prisión domiciliaria.