El efectivo de 35 años de la Comisaría de Las Coloradas que quedó vinculado a una banda narco de Aluminé recientemente desarticulada, fue oficialmente apartado de sus tareas de manera temporal. Jefatura aguardará el dictamen final de la Justicia Federal respecto de su vinculación al narcotráfico para determinar qué sanciones corresponden aplicarle.

Cabe recordar que el efectivo en cuestión, quien prestaba servicios en la Comisaría 31 de Las Coloradas, quedó bajo investigación de la División Antinarcóticos Zapala a fines de enero, luego de que se los sindicó como miembro de una banda narco de Aluminé, que operaba mediante dos bocas de expendio; una en el domicilio del principal sospechoso de la causa y su pareja, y otra en la vivienda de su cómplice.

Con el avance de la causa y la identificación de los sospechosos, también surgió una vinculación con un efectivo policial. De esta manera, desde el Juzgado Federal de Zapala, a cargo de la jueza Silvina Domínguez, se ordenaron los tres allanamientos que fueron concretados la madrugada del martes 22 de junio por los efectivos de Antinarcóticos.

Según informó en ese entonces el comisario general Miguel Jara, Superintendente de Investigaciones de la Policía del Neuquén, el operativo permitió el secuestro de más de $2 millones en dosis de marihuana y cocaína listas para la venta al narcomenudeo; 120 mil pesos y unos 400 dólares, celulares, elementos de corte y fraccionamiento y tres vehículos.

Todo ello, en línea con la investigación desplegada, fue puesta a disposición del Juzgado Federal de Zapala. Los tres hombres -incluido el policía- y una mujer estuvieron detenidos unas horas y luego recuperaron su libertad tras ser notificados de su imputación por infracción a la Ley 23737, sobre tráfico y comercialización de estupefacientes bajo la modalidad de narcomenudeo.

Ahora, a una semana de ese procedimiento, este medio pudo confirmar que Jefatura ya pasó a disponibilidad al efectivo, quien en el último tiempo cumplía tareas de civil en la comisaría. Esto quiere decir que desde la dirección de la fuerza policial se apartó de sus tareas al sindicado para prevenir un entorpecimiento de la investigación, y una vez que la Justicia Federal pueda determinar -o no- su vinculación al delito, se decidirá qué sanciones le corresponden, posiblemente su apartamiento definitivo de la fuerza.