
Un trabajo repleto de amor y salud
La lactancia materna no es solo el primer alimento del bebé: es también un acto de amor y salud. En Zapala, este proceso cuenta con el acompañamiento profesional del Centro de Lactancia Materna.
Elida Ibañez, licenciada en enfermería y referente del Centro de Lactancia del Hospital local, quien junto a su equipo trabaja incansablemente para concientizar, acompañar y promover la lactancia materna desde el nacimiento hasta que la mamá y el bebé lo decidan, contó los detalles de la labor diaria.
“El objetivo es que cada mamá pueda contar con la información y el apoyo necesario para tomar decisiones conscientes. La lactancia tiene beneficios indiscutibles tanto para el bebé como para la madre”, explicó Ibañez en diálogo con “Otra Mañana”.
El trabajo comienza incluso antes del nacimiento. Desde el hospital se brindan talleres de pre parto, donde se informa a las futuras mamás sobre la importancia de amamantar, cómo prepararse y qué hacer frente a dificultades comunes.
Esta semana, el equipi participó de un encuentro de la Red de Leche Humana en Neuquén, donde se compartieron nuevos datos y avances sobre las colectas de leche materna. En este marco, remarcó la importancia de donar leche humana, un gesto solidario que puede marcar la diferencia en la vida de muchos bebés internados en otras localidades. “Les enseñamos a las mamás cómo conservar correctamente la leche extraída. Esa leche no se puede perder: es valiosa, es esperada, y puede ayudar a que un bebé se recupere y vuelva a casa”, expresó.
En Zapala, las personas interesadas en ser donantes de leche materna pueden acercarse al servicio de pediatría del hospital desde las 6 de la mañana, todos los días, o comunicarse al teléfono 2942-529833. Además, pueden utilizar la App del Banco de Leche, que guía paso a paso todo el proceso para convertirse en mamá donante.
Los beneficios de la lactancia materna son innumerables: para el bebé, representa la fuente más completa de nutrientes, fortalece el sistema inmunológico, previene enfermedades y favorece el desarrollo cerebral. Para la madre, ayuda a recuperar la figura, reduce el riesgo de cáncer de mama y de ovario, y fortalece el vínculo emocional con su hijo.