Una firma de abogados encontró su veta exportadora, desembarcó en Uruguay y apunta al mercado latino de Estados Unidos
CORDOBA.- “Nacimos pensando en el mundo, con un enfoque global. Siempre traté de exponenciar el negocio. No solo la Argentina era el lugar; había que cambiar la mentalidad de ‘pago chico’ q...
CORDOBA.- “Nacimos pensando en el mundo, con un enfoque global. Siempre traté de exponenciar el negocio. No solo la Argentina era el lugar; había que cambiar la mentalidad de ‘pago chico’ que a veces se tiene y apuntamos a pensar global desde el primer día. Cuando la idea era incipiente ya analizaba otros mercados como España o Uruguay”. Quien habla es Juan Manuel Baya Casal, abogado (aunque se define como “emprendedor”) y uno de los fundadores de Defende.me, una startup que ya opera en Uruguay.
La plataforma legaltech surgió con el objetivo de trabajar con los consumidores que vean afectados sus derechos. Ofrece acceso a “información precisa y de calidad” junto a un servicio jurídico “único en la Argentina y Uruguay” a un precio, aseguran, al alcance de la mayoría.
Además de Baya Casal, son sus creadores Andrés Varas y Magdalena Fernández. “Trabajamos como comunidad para obtener la justicia que merecen los consumidores a los que escuchamos y acompañamos en el proceso con un equipo de profesionales especializados en el área”.
La idea surgió a partir de una publicación de Baya casal en su Facebook en 2015 en la que se refería a una cuestión que, en ese momento, era de interés para un número importante de consumidores. “Por la repercusión detectamos que había un nicho, un mercado que requería de atención -dice a LA NACION-. Atendemos diferentes problemas, aunque la del sobreendeudamiento es la más importante, al menos en la Argentina. Analizamos inmediatamente creado la escalabilidad del negocio”.
En 2017 la plataforma ya estaba funcionando. La inversión inicial fue “cero; mucho pulmón” y a medida que pasaron los meses fueron reinvirtiendo lo que generaba el emprendimiento. Baya Casal define que “buscar fondos cuesta mucho; entendemos que podríamos terminar convertidos en un hub de abogados”.
Hace un año consiguieron US$50.000 de un Fun Friend and Family, para el desarrollo de la plataforma propia y ahora invertirán una cifra igual para la automatización de los procedimientos, tanto para demandas individuales y colectivas o para negociaciones. Esos recursos provienen de Capital Semilla y la transformación digital, explican, les permitirá la escalabilidad del proyecto en distintos países, además de generar una experiencia de usuario “óptima” para satisfacer el público objetivo incipiente en las nuevas fronteras donde opera la empresa.
Hoy la firma tiene una facturación de aproximadamente $2,5 millones por mes y proyectan llegar a estar entre $10 millones y $20 millones el año que viene.
En la Argentina operan con unos 3000 clientes que pagan una cuota mensual (suman entre 200 y 300 mensualmente), además de otros clientes diferenciados. En Uruguay, el año pasado hicieron un testeo con publicaciones de Facebook a través de un asociado y ahora tienen unos 40 clientes operativos todos de procesos de negociación (no de litigio). El costo final ronda los US$100 y el inicial, US$ 23.
En cuanto a sus planes de expansión, la apuesta es al mercado latino de Estados Unidos. Baya Casal referencia que la mora estimada en ese país es de unos US$700.000 millones. “Hay unos 60 millones de latinos que requieren asesoramiento, colaboración con los problemas que tienen. Ya iniciamos la búsqueda de un socio”, dice.
España también está en la mira y, después, el resto de Latinoamérica, fuera de la Argentina y Uruguay: “Nos basamos en una plataforma similar, donde buscamos las congruencias en cada país y eso nos permite un softlanding en cada destino que elegimos. Analizamos las trabas y tratamos de sortearlas. El emprendimiento surgió pensando desde afuera de la caja, buscando resolver problemas masivos”.
“Los miembros de la comunidad cuentan con todas las herramientas necesarias para afrontar los conflictos jurídico-financieros por los que estén atravesando, acompañados por nosotros en todas las instancias, tanto pre-judiciales como judiciales, brindando un servicio de excelencia accesible a todos”, indica Baya Casal. Los temas que más se trabajan, por ahora, en los dos mercados son los de sobreendeudamiento.