En el sprint final, Mauricio Macri se sumó a la campaña y esta mañana repartió boletas de Juntos por el Cambio en San Isidro y Vicente López junto a los candidatos a intendentes locales. Tras sus declaraciones sobre Javier Milei durante una conferencia en Harvard, que originaron un chispazo público con Patricia Bullrich y desconcertaron a dirigentes del espacio, el expresidente se fotografió ayer junto a su candidata presidencial en la previa del debate y sumó a su agenda de esta semana recorridos en distritos clave para mejorar el desempeño electoral del armado opositor.

“Siempre dijo que iba a estar en la campaña, es una iniciativa propia”, señaló a LA NACION una persona del entorno más íntimo del expresidente. Según precisó, Macri tiene previsto caminar en el interior de Santa Fe, en la ciudad misionera de Posadas y, hacia el final de la semana, mostrarse junto a Bullrich. “El recorrido se da al final porque es cuando la gente decide su voto”, sumó sobre la incorporación del expresidente al tramo final de la pelea electoral, en la que la mayoría de las encuestas ubica a su candidata batallando por retener el 28% que obtuvo el espacio en las PASO.

De jean y camisa, Macri recorrió el centro comercial de las ciudades del norte del conurbano bonaerense junto a Ramón Lanús y Soledad Martínez y conversó con los vecinos del lugar de cara a los comicios del 22 de octubre, en los que la exministra de Seguridad pelea voto a voto por incorporarse a un ballotage. Consultada al respecto, la postulante presidencial de Juntos por el Cambio dijo esta mañana que habló con el expresidente y que no tiene “ninguna duda” que Macri está “totalmente involucrado” en la campaña de la coalición opositora.

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“Va a tratar de fortalecer el voto macrista y buscar ese 40% que sacó en las últimas elecciones”, explicó una persona del equipo de Macri a LA NACION. Es probable que el expresidente haga campaña solo, como cuando viajó a Córdoba y repartió boletas de Bullrich. “Los candidatos locales lo invitan y ellos arman la agenda”, explicó uno de sus colaboradores.

La militancia de Macri se da luego de una semana compleja para Juntos por el Cambio. Después del deslucido desempeño de Bullrich en el primer debate, y tras las declaraciones de Macri durante la presentación de su libro Para qué en la Universidad de Harvard, cuando habló de un hipotético triunfo de Milei, el expresidente quiso recomponer las fisuras dentro de su espacio. Por eso, trató de sortear las dudas respecto de su apoyo a la candidata de Juntos por el Cambio y se mostró determinado a repartir su boleta frente a posibles reproches de dirigentes cercanos.

Referentes radicales y de la Coalición Cívica son quienes más desconfían del expresidente. Lo acusan de “traicionar” al espacio que fundó para ubicarse como el patrocinador del resurgimiento de la derecha liberal en el país.

Como forma de despegarse de estas acusaciones, Macri salió a la cancha. Si bien no estuvo presente durante la segunda contienda discursiva entre los candidatos presidenciales, visitó a Bullrich en el Hotel Palladio, donde la postulante a la Casa Rosada se concentró con su equipo. Allí, se tomaron una foto junto a referentes provinciales y rápidamente la hicieron circular.

La opción de caminar por San Isidro y Vicente López está vinculada con el hecho de que son algunos de los municipios que más votos le aportan a Juntos por el Cambio en el conurbano. En Vicente López, terruño de Jorge Macri, quien apuesta a que Soledad Martínez se convierta en su sucesora, el PRO viene ganando hace más de 10 años con una amplia diferencia frente al kirchnerismo.