Tres docentes de la Facultad de Odontología de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) fueron apartados luego de ser acusados de diferentes tipos de abusos -que incluyen el sexual, el acoso y el abuso de poder-, por parte de dos estudiantes y la empleada de uno de los profesionales.

De las tres acusaciones, una se denunció en la Justicia en mayo y está en plena etapa de investigación. Las otras dos, por el momento se mantienen como señalamientos públicos.

Tras la difusión en redes sociales de los testimonios de quienes los acusaron (cuyas identidades han sido resguardadas), ayer por la mañana se realizó una protesta en la puerta de la unidad académica, ubicada en 50 entre 1 y 115, convocada por la Federación Universitaria de La Plata (FULP).

La Secretaría de Género de la Facultad informó que los dos docentes que no tienen denuncias penales fueron apartados preventivamente el lunes. Por su parte, el profesor denunciado por abuso sexual en su consultorio particular fue desplazado el pasado mes de mayo, tras la denuncia ante la justicia.

La causa por abuso sexual que se tramita en la Justicia fue iniciada en mayo pasado por parte de una mujer que era empleada en el consultorio particular del odontólogo y docente de la UNLP. Según la denuncia, los hechos ocurrieron desde febrero de 2021, cuando comenzó a trabajar allí. De acuerdo con el testimonio de la joven, el hombre comenzó a hacer comentarios o preguntas sobre la intimidad de la mujer, e incluso le tocaba debajo de la espalda, informó esta semana DiarioAR.

El profesional siguió con pedidos para hacerle masajes, algo que ella rechazó hasta ceder por la insistencia del jefe. “Comenzó a moverme la ropa con la excusa de los masajes y llegó a sacarme la remera y el corpiño. Cada vez que me masajeaba, intentaba tocarme alguna parte íntima”, narró. Además, conto que una vez ella estaba muy resfriada y el hombre le dijo que se bajara los pantalones hasta el piso para inyectarle corticoides.

Por su parte, una estudiante de la Facultad de Odontología acusó de manera pública, pero resguardando su identidad, a un docente de la materia práctica Odontología Preventiva y Social (OPS).

La joven contó en las redes sociales que lo que más le gustaba de cursar esa materia era que por primera vez podría tener contacto con pacientes en Unidades Sanitarias o “salitas”. No obstante, el docente solo la hizo llenar las fichas de los pacientes que sus compañeros atendían.

En una ocasión, cuando ella estaba sentada en un banco completando fichas, el hombre la tomó por detrás a la altura de los pechos y la alzó con el argumento de mejorar su postura. En otra oportunidad, sus compañeros faltaron a la práctica, por lo que el docente la puso a atender a un nene de 5 años. Según su testimonio, la atención pediátrica la realizan estudiantes más avanzados y aseguró que tampoco contaba con el instrumental adecuado para un niño.

“Bueno, empezá a raspar esto bien despacito como acariciás a tu novio a la noche”, dijo el hombre, según la reconstrucción de DiarioAR. Luego, ella le pidió asistencia y el docente le dijo: “Correte, ¿ves? Al final no podés hacer nada”.

La joven contó que al terminar la cursada quiso canalizar su preocupación por lo vivido en el Centro de Estudiantes, que es dirigido hace 30 años por el Movimiento Odontológico Independiente, pero solo le dijeron que para pedir que se remueva al docente había que juntar cinco denuncias anónimas y así presentarlas ante el decano.

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El tercer caso es el de un estudiante que acusó a un docente de hacerlo rendir seis veces el mismo examen por -según apuntó- una cuestión de venganza. Es que el hombre, según se denunció, “elegía a los alumnos que fueran rubios y de ojos claros para que cursaran con él en primer año”. Además, se indicó que había una lista negra de estudiantes a los que el hombre les ponía muchas trabas para aprobar la materia.

El joven lo tuvo como docente en la materia Odontología Preventiva y Social, y contó que le llamaba la atención que el hombre durante los ratos libres buscaba en las redes sociales los perfiles de alumnos que consideraba “traidores”, a quienes luego desaprobado.

Más adelante, el joven indicó haber sido parte de la lista negra, porque el docente le mandó un mail en el que le decía: “Tené mucho ojo con lo que hablás de mí. Ya me vinieron a contar lo que dijiste. Ya avisé que te sigan grabando y filmando, ni bien tenga pruebas hablo con las autoridades de la Facultad y te hago expulsar. Me defraudaste como alumno y especialmente como persona. Sos un mediocre y un pésimo alumno”.

El joven decidió enfrentar al docente que, de acuerdo al testimonio, solo le retiró la palabra. Tras ello, contó que tuvo que rendir seis veces la materia hasta que pidió el cambio de docente en la mesa de examen y fue aprobado.

Conocidos los casos, FULP también reclamó la falta de contención del Centro de Estudiantes de la Facultad de Odontología, y lamentó desde un comunicado “el accionar y el silencio cómplice que genera desmovilización y vacío de representación gremial estudiantil” en esa casa de estudios.