Neuquén: la provincia más cara del país enfrenta una inflación sin precedentes.
Mientras el promedio nacional se ubicó en un 117,8% anual, los neuquinos enfrentaron un aumento acumulado del 139,2%, según datos de la Dirección de Estadísticas y Censos de la provincia.
Los alimentos y bebidas no alcohólicas lideraron el impacto, con un incremento mensual del 4,2% en diciembre y un asombroso 155,2% anual. Estas cifras superan ampliamente al promedio nacional del 142,3%, reflejando la dificultad de las familias para cubrir necesidades básicas en la región.
Los servicios básicos también mostraron aumentos alarmantes. Vivienda, agua, electricidad y combustibles registraron una suba mensual del 4,5%, alcanzando un acumulado del 138,5% anual, muy por encima del promedio nacional del 125,4%. Esto posiciona a Neuquén como una de las provincias donde acceder a servicios esenciales se torna cada vez más oneroso.
En el ámbito de la salud, la provincia evidenció un incremento mensual del 4% y un acumulado anual del 136,8%, superando al promedio nacional del 127,4%. Estos datos reflejan un encarecimiento de medicamentos, consultas médicas y tratamientos, impactando especialmente a los sectores más vulnerables.
El sector gastronómico y hotelero no fue la excepción. Los precios en restaurantes y hoteles aumentaron un 4,6% en diciembre y un 144,6% anual, mientras que el promedio nacional en esta categoría fue del 132,4%. Esto pone en jaque tanto a los residentes como al turismo, una actividad clave para la economía local.
La inflación descontrolada afecta directamente el poder adquisitivo de los neuquinos. A pesar de las negociaciones salariales, los aumentos obtenidos por los trabajadores no logran empatar la inflación acumulada, lo que agrava la pérdida de capacidad económica de las familias.
Además, la diferencia entre los índices locales y nacionales evidencia un fenómeno particular en Neuquén. La provincia, conocida por su actividad hidrocarburífera, parece enfrentar costos adicionales que no se reflejan en el resto del país.