“Se viene una muy jodida”. El distrito del conurbano con mayoría peronista que resistió la ola libertaria y amaneció con miedo
Daniel Gómez, de 56 años, que trabaja en un centro de distribución mayorista de verduras en Florencio Varela, en la zona sur del conurbano bonaerense, no duda cuando LA NACION le consulta su opi...
Daniel Gómez, de 56 años, que trabaja en un centro de distribución mayorista de verduras en Florencio Varela, en la zona sur del conurbano bonaerense, no duda cuando LA NACION le consulta su opinión respecto del triunfo de Javier Milei: “Los argentinos nos creemos muy piolas, pero seguimos comprando buzones”.
Él dice que ya vivió la privatización de las empresas estatales en los 90, el uno a uno, y cómo eso derivó en la crisis de 2001. “Lo que se viene no es ninguna novedad, no hay nada nuevo en esas políticas”, agrega.
A su vez, Gómez, recuerda los años en los que vivió la dictadura militar, en donde desaparecieron amigos suyos y de su familia y rechaza los “guiños” de Milei a los represores. Un ejemplo de ello fue cuando el libertario usó la palabra “excesos” al ser consultado por aquella sombría época durante el último debate presidencial. “Eso mismo decían los represores, que hubo excesos. Los pibes jóvenes no lo vivieron y tal vez no les significa mucho, pero a mí me parece muy grave”, opina Gómez.
El 22 de octubre pasado Andrés Watson, el intendente por Unión por la Patria de Florencio Varela, fue reelecto con el 56,3% de los votos. En esa elección, su candidato a presidente, Sergio Massa, había quedado casi siete puntos por encima de Javier Milei en la contienda por tener las riendas del país los próximos cuatro años. En ese momento, Watson dijo sobre el candidato libertario: “La gente no es tonta, sabe lo que vota”.
Sin embargo, ayer Milei lo dio vuelta a nivel nacional y va a presidir la Argentina al quedar 11 puntos arriba del tigrense. Aunque esa tendencia, no se replicó en Florencio Varela, donde Massa ayer arrasó en las urnas; obtuvo el 63% de los votos, contra el 36% de los libertarios.
En ese distrito bonaerense, solo el 46,8% de las viviendas particulares tiene cloacas, cuando a nivel provincial este valor se encuentra en el 60,5%. El 45,4% tiene red de gas o electricidad para cocinar, mientras que el promedio de la Provincia es del 65%. Mientras que en cuanto a la conectividad con la red de agua, Florencio Varela se encuentra seis puntos por encima del promedio bonaerense, con un 83,2%.
“Acá los pibes jóvenes piensan que este tipo los va a sacar de la pobreza en la que están; yo creo que se equivocan. Se viene una muy jodida con Milei. Pero bueno, ahora hay que esperar lo mejor”, señala Silvio Benítez, de 25 años, vecino de Florencio Varela.
Milei, en unas de sus primeras definiciones como presidente electo, aseguró que privatizará YPF. “Todo lo que pueda estar en las manos del sector privado, va a estar en las manos del sector privado”, dijo hoy el presidente electo. Sin embargo, en la estación de servicio YPF ubicada en Avenida 14 y Avenida Calchaquí, en este partido, los playeros, en su gran mayoría, optaron por el libertario. “Si igual no nos alcanza la plata y nos aumentan poco el sueldo...”, describe una empleada que prefirió no dar su nombre.
Claudio Tejolan, de 70 años, se dedica a arreglar sistemas de refrigeración. Dice que es “peronista, pero del primer Perón”, y ayer decidió votar a Milei. “Si se presentaba Cristina, la votaba, pero Massa no es kirchnerista, no se sabe ni lo qué es. Ahora esperemos que le vaya bien a Milei, había que votar algo distinto, no se podía votar a los mismos que están ahora con el desastre económico actual”.
Cerca de Tejolan, está Paula, que prefirió no dar su apellido y está en las antípodas de Milei. Cree que nada bueno puede salir de las políticas del libertario, en especial para las mujeres. “Es un machista, nunca se pronunció a favor de nuestros derechos. Tampoco me gusta que se vuelva a cuestionar el derecho al aborto”, lamenta.
Mariano Lezcano, de 66 años, es correntino pero hace años vive en Florencio Varela. Lleva puesta una camisa abierta, un short de Boca Juniors y una ojotas. Él no duda, es peronista, pero entiende que la gente frente a la calamitosa situación económica haya optado por otra opción, aunque el libertario haya dicho en campaña que hará un ajuste de shock, o como dijo ayer en su discurso triunfal, “sin gradualismo”.
“¿Vos pensás que la política va a ser la que se llevará el costo del ajuste? Siempre es la gente. Yo laburaba en curtiembres y en los 90 cerraron todas y me quedé sin laburo. Por suerte ya estoy jubilado y espero poder mantener mi jubilación. Pero habrá que ver qué pasa, me preocupa por los jóvenes”, describe Lezcano.
Jorge Orué, de 66 años, es el canillita de la zona y además atiende un puesto de diarios. Él es radical y le costó decidir su voto, hasta que hizo el siguiente razonamiento: “Tengo 40 años de aportes y con mi jubilación cobro menos que un piquetero”.
Por su parte, Cristian Hugo, de 52 años, que tiene una chatarrería, no votó porque, a pesar de que hace cinco años hizo el DNI, nunca lo incluyeron en el padrón. “Acá está todo mal, tengo muchos conocidos que viven panza arriba cobrando planes, viajando con certificados de discapacidad truchos. Yo quiero abrir un local y es imposible por las trabas que te ponen. Así no se puede, por eso la gente votó otra cosa”, indica Hugo.
Mientras que Agustina Fonseca, que es peronista, ve un futuro incierto: “En Florencio Varela se viene haciendo un buen trabajo, aunque todavía faltan muchas calles por hacer, entre otras cosas. Pero acá suele ganar el peronismo, sobre todo frente a un candidato que propone viejas recetas. Nosotros no nos olvidamos que tenemos nuestros derechos laborales gracias al peronismo”, concluye.