Desde el sindicato indicaron que en Neuquén tienen 40 afiliados afectados por el COVID-19 entre contagiados y aislados. Analizan ir al paro en caso de no obtener una respuesta.

El secretario del Sindicato de Luz y Fuerza de Río Negro y Neuquén, Antonio D'Angelo, informó que los trabajadores están en alerta nacional ante la falta de respuesta por el pedido de vacunación del personal que es considerado esencial.

D'Angelo no descartó la posibilidad de llegar a un paro en caso de que no recibir la vacuna contra el coronavirus dada la cantidad de trabajadores afectados. “En Calf, llegamos a tener la semana pasada, entre aislados y contagiados, arriba de 41 trabajadores afectados. También tuvimos entre 10 y 15 casos en Edersa, y en Cutral Co tenemos compañeros que han perdido a su esposa y que ellos han estado muy graves”, detalló el sindicalista en declaraciones a LU5.

D'Angelo señaló que desde hace más de dos meses la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza (Fatlyf) está gestionando a nivel nacional la posibilidad de que el personal del sector sea incluido en los esquemas de vacunación de la población objetivo.

“Hemos modificado turnos en algunas centrales para que no haya tanto movimiento de gente. No podemos faltar a trabajar. Tenemos muchos infectados en el país, compañeros fallecidos, como así también sus esposas y madres”, aseguró.

Recordó que continuaron trabajando desde el primer día del inicio de la pandemia. “Entendemos que somos trabajadores esenciales, creemos que tenemos que estar vacunados por prestar un servicio público como es la electricidad”, indicó D’Angelo.

Sostuvo que el pedido de vacunación ante las autoridades sanitarias lo está realizando a nivel nacional la Federación que los nuclea. “A la vacunación la vienen pidiendo las mismas empresas, nosotros lo dejamos en manos de la Federación de Luz y Fuerza a nivel nacional. En la jurisdicción tenemos gente que trabaja en la calle, en la guardia y gente que atiende a quienes van a pedir la conexión”, agregó.

El sindicalista estimó que en la región serían unos 1.400 o 1.500 los trabajadores vinculados al sistema eléctrico. “Habría que analizar los sectores más esenciales para paliar la situación”, añadió D'Angelo quien se mostró esperanzado en que esta situación sea zanjada y puedan acceder a la vacunación en el corto plazo.