Las negociaciones por los incrementos salariales de este año, entre el gobierno provincial neuquino y los gremios que nuclean a trabajadores del Estado, hicieron que afloraran con mayor fuerza los cuestionamientos de los trabajadores autoconvocados de la Salud hacia la conducción de ATE.

El sector, al que se conoce como “los elefantes”, no se siente representado por el conductor de ATE Neuquén, Carlos Quintriqueo, a quien en reiteradas oportunidades ha acusado de “carnero”. Ahora, desde el Hospital Castro Rendón, le endilgaron no haber realizado asambleas en los hospitales y lugares de trabajo para poner en debate “qué es lo que vamos a ir a exigir” en las mesas de negociación salarial.

“Se sentaron a negociar nuestro salario y lo único que pidieron es que el aumento sea retroactivo a enero y semestral, dejando que el monto lo ponga el Gobierno”, dijeron desde el mayor centro asistencial de la provincia. Y agregaron: “Necesitamos un aumento salarial de 50% ya en una sola cuota para recuperar lo perdido y actualización trimestral según IPC, para que ningún trabajador cobre por debajo de la canasta familiar que hoy en Neuquén llega a 130.000 pesos”.

Los elefantes se encuentran en estado de paro y movilización, ATE también está de paro y Quintriqueo carga sobre sus espaldas con una causa judicial por usurpación y afronta un presente de derrotas en elecciones de delegados para juntas internas. Ahora los elefantes dijeron: “Tenemos que tomar este paro  en nuestras manos y movilizarnos con nuestras propias banderas y reivindicaciones”; es decir para diferenciarse de la conducción gremial.

Los elefantes reclaman aumento salarial del 50% ya, pase a planta permanente de todo el personal precarizado y apertura inmediata de paritarias con paritarios elegidos en asamblea de sector.